miércoles, 18 de noviembre de 2009

Pan para hoy hambre para mañana

Ante una situación tan complicada como puede ser un secuestro existen dos posiciones claras que puede adoptar un Gobierno, la opción elegida por el Gobierno de España me parece que ha sido la equivocada. De cara al publico puede que esta forma de actuar a corto plazo sea la mas fácil y sencilla, pero auguro que a medio o largo plazo esta actuación ha creado un precedente peligroso para nuestra flota pesquera en el Indico. La segundo opción es no negociar o realizar una negociación mucho mas dura y seria.

Comprendo todas y cada uno de las actuaciones, declaraciones de los familiares de los secuestrados y supongo que si yo estuviese en su situación hubiese actuado de forma similar. Pero el gobierno español no solo dirige los designios de los treinta y seis marineros sino de cuarenta y seis millones de españoles. Una decisión como la tomada por el ejecutivo de permitir el pago del rescate, prohibido en la Legislación Española, así como dejar escapar a los piratas una vez finalizado el secuestro deja la posición del Estado muy debilitada para futuras situaciones similares.

Esta claro que estos piratas tiene una credibilidad cero y que no son de fiar, de lo que si me fío es de las declaración del jefe de los piratas indicando que el día 15 de enero es la fecha tope para la liberación de sus dos compañeros de travesuras que están en España según el pacto que han llegado con el Gobierno de España. En que posición queda el poder judicial español si expulsa a los dos secuestradores con una pena inferior a seis años por 36 secuestros y lo que es aun más doloso un indulto del Gobierno. Si el día 15 estos dos delincuentes no han regresado a su país y se produce otro secuestro de otro atunero quien le va a explicar a sus familias las causas de la retención de sus seres queridos, espero que sea el Presidente del Gobierno quien se presente en el domicilio de las familias a dar las explicaciones oportunas.

La actuación de Estado acaba de convertir a los barcos españoles en la gallina de los huevos de oro de la piratería internacional, pagan bien y escoltan con sus fragatas y helicópteros a los piratas hasta las costas. Para que complicarse la vida secuestrando barcos de otras nociones que no se pliegan a las reivindicaciones de los piratas a las primeras de cambio.

Personalmente creo que ha sido un error pactar a cualquier y precio dando una impresión de descoordinación y falta de un criterio único entre los distintos ministerios implicados que únicamente a favorecido a los corsarios somalís. Ante estas situación se tiene que presentar uno posición fuerte, firme, posiblemente antipopular ante la opinión publica que consiga que actos como este no vuelva a suceder.