Como mínimo debería estar muy sorprendido por las ultimas actuaciones de nuestra izquierda, pero por desgracia casi nada de sus actuaciones me consiguen sorprender, eso si a diario me estremezco pensando quienes son los que dirigen lo que queda de España.
La primera anécdota de esta semana ha sido el aumento del sueldo de los trabajadores de UGT. Debe de ser fácil esta negociación en la que no existe patronal, con lo cual la decisión que han tomado es subirse el sueldo un 7%, no pasa nada ya pagamos el resto de contribuyentes. Me parece una decisión de lo más acertada este aumento de salarios seguro que consigue que de una puta vez estos tipos se dediquen a defender al trabajador y no a reírle las gracias al gobierno.
La segunda noticia, perdón es mas una gracieta, es que estamos en una operación de control del espacio aéreo, lo que viene siendo para los que no somos de la ceja, una guerra contra el sátrapa Gadafi, no voy a entrar en valorar la legalidades de una y otras guerras, pero esto de meter los F-18 a solucionar los problemas internos de un dictadura árabe me suena a chufla.
Pero el detalle mas simpático es que el gobierno de España dio el visto bueno a la venta de material bélico por un valor de 6,9 millones de euros en el primer semestre de 2010 violando el articulo 8 de la Ley 53/2007 de Comercio de Armas. Con un poco suerte algo de lo que nos compraron sirve para pegarle un pepinazo a uno de nuestros F-18 y con la coña la segunda parte de “La escopeta Nacional” esta fácil.
A ver si se olvida el personal un poco el personal del drama nipón y nos centramos en las ocurrencias de nuestra izquierda.
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